Las cuatro esquinas
VERDE QUE TE QUIERO VERDE
¿Podemos permitirnos otro “Gorguel” con el hidrógeno verde?. No y mil veces, no.
J.A.Ruiz Vivo
Futuro .El futuro es verde. Verde que te quiero verde. Verde viento. Verdes ramas. El gran Federico así lo cantaba en el barco sobre el mar y en el caballo en la montaña. Verde que te quiero verde. Ya te digo, el futuro es verde. Verde , de hidrógeno verde; ‘for example’. En el gobierno de Fernando no se yo, te lo juro por Snoopy, si todos lo tienen clarinete. Alguno me consta que sí. Otros u otras , sin embargo, andan de perfil. Y en el ayuntamiento de Noelia tampoco se tiran cohetes, perdona que te diga. Hidrógeno verde que te quiero verde. ¿Nos podemos permitir otro “Gorguel”?. Evidentemente, no. Oído cocina.
Vamos a lo concreto, para hacértelo fácil. Escombreras, por su naturaleza y por sus características, es un lugar idóneo, único diría yo, para captar inversiones en energías alternativas. Energía verde que te quiero verde. Aquí ,en estas mismas páginas, ya lo ha dejado escrito el maestro Buitrago. La apuesta de futuro para esta Región es este tipo de energía. Y para producirla se necesita una gran producción de agua osmotizada. O dicho de otra manera, agua industrial que pueda atraer inversiones tecnológicas de alcance. Y esa agua solo tiene un camino de producción, la desalación. Un grupo de empresarios murcianos ya lo vieron claro hace un par de años y se pusieron en el proyecto de construir una nueva desaladora en Escombreras. Nada que ver con la anterior, vade retro, que está judicializada y , por tanto, maldita para algunos entornos de San Esteban que prefieren pagar un disparate con el cargo de mantenerla infrautilizada. Nada que ver, te cuento, porque aquella, la que construyó Florentino y que PAS se negó a comprar por su justiprecio ( ojo al dato que diría el gran García, mi butanito favorito) que estaba destinada a producir agua desalada para uso agrícola o urbano. Esta segunda planta, sin embargo, produciría agua para uso exclusivamente industrial , lo que , como ya quedó reflejado en el foro que este periódico organizó al respecto, atraería a Cartagena no menos de una decena de inversiones de combustible verde. Careciendo , como carecen, de proyectos emblemáticos cuesta creer que los gobiernos de Fernando y de Noelia no le den a estas alternativas la singularidad, la simplificación administrativa y el apoyo que merecen. Vuelvo a repetir la pregunta: ¿Nos podemos permitir otro “Gorguel”?. La respuesta es no. Mil veces no.
Calor. Ante el hecho contrastado de que el proyecto murciano de nueva desaladora no acaba de encontrar calor, por mucho que te extrañe, ni en la administración regional ni en la local, pese a contar con todos los plácemes del Ministerio de Medio Ambiente y Transición Ecológica ( o precisamente por ello) se disparan, es lógico, las especulaciones. Hay quien adjudica a San Esteban una actitud de frenar todo lo que esté relacionado con la desalación en Escombreras a rebufo del caso “ La Sal”, lo que no dejaría de suponer un soberano contrasentido porque las máquinas no delinquen y porque hay entes y empresas incluso públicas como Acuamed o Adif que también tienen casos judicializados incluso mas graves, y no por ello dejan de producir o de actuar. No habría que olvidar en estos casos, por dar una pista a los despistados, que un gobierno, puesto a infringir lo reglamentado, lo puede hacer por acción, pero también por omisión. Y el que quiera entender, que entienda.
Hidrogea. Lo que te decía. La carrera por la desalación industrial en Escombreras no tiene marcha atrás por mucho que haya quien se empeña en mirar hacia otro lado. El grupo murciano inversor lleva dos años de adelanto, informes ministeriales favorables y un proyecto para desalar unos 25 hectómetros cúbicos que convertirían a Escombreras en el “Valle del Hidrógeno Verde”. Han solicitado a la alcaldesa audiencia para presentarle el proyecto, pero no encuentran respuesta por lo que no se descarta que en breve sus promotores se decidan a presentarlo a otros grupos municipales que si muestran mucho interés por la iniciativa.
Por otro lado, Hidrogea, la concesionaria de gestión de agua potable, saneamiento y depuración en Cartagena, ya ha iniciado sus planes para construir una planta que desale 20 hectómetros cúbicos anuales. El proyecto, hay quien asegura, se encuentra en frase embrionaria. Y no falta quien piensa que darán el paso definitivo, pero no antes de confirmar si su servicio actual al área industrial de Escombreras se encuentra en situación de precariedad o no.
Ralentí. Mientras tanto, lo de siempre. Mientras otros corren, aquí al ralentí. Válgame san valgamé con los proyectos emblemáticos en la mejor tierra del mundo. Juanma Moreno, como en Doñana, nos gana por tres manos. Huele lo importante y pone a su gente a trabajar. En Huelva, con un puerto mucho menos apropiado que Escombreras, se acumulan de forma espectacular los proyectos de energía verde (Iberdrola, Cepsa, Trina Solar, Arbro, etc) hasta el punto de tener que ampliar casi de forma continua el parque empresarial onubense. En Castellón, Mazón, el “hermano del agua” de López Miras que nos adelanta por la derecha, ya ha conseguido una inversión mil millonaria de Ignis. Aquí alguien tendrá que despertarnos de este sueño de los injustos. Me cuentan que la planta de biogás en el campo de Cartagena que evitaría los vertidos de purines tampoco encuentra el impulso que debiera. Camarón que se duerme se lo lleva la corriente. Nunca mejor dicho. Por verde y por dormilón.